Yo soy suicida

 

"Eres fuerte. Eres feliz. Siempre puedes parar.'

Psicopirata 

Batman ha decidido aceptar la oferta de Amanda Weller e ingresar clandestinamente a Santa Prisca para secuestrar al Psicopirata, a ver si el rufián puede reestablecer la cordura en Claire, la Gotham Girl. Sabiendo que no puede arriesgar a su equipo en tan complicada misión, reúne un muy reducido grupo comando especial formado por varios criminales compuesto por el Ventrílocuo Arnold Wesker, el Tigre de Bronce, y los enamorados ladrones Punch y Jewelee.Y finalmente, Catwoman, quién está condenada a la inyección letal por doscientos treinta y siete homicidios. Es imposible no sorprenderse de la cantidad de muertes causadas por esta antiheroína, más aún al ser confesadas por ella misma.

Estamos ante una misión de asalto a una fortaleza en toda regla -la prisión se Peño Duro convertido en Palacio de Gobierno-, en una isla que tiene a Bane como su mandatario principal y con quién es imposible negociar una extradición de alguien a quién él mismo ha negociado dar asilo. Aquí conocemos, entonces, el motivo de tamaña decisión. Bane está roto, dañado. Su propia autoestima está destruida y su personalidad también en otro tanto. La adicción al veneno lo ha dejado en una situación de vulnerabilidad por la cual necesita un estímulo externo para llenar su frágil interior. El Psicopirata ejerce esa función en él, ayudando a fortalecer su tranquilidad y manteniendo su estabilidad.

Tom King utiliza un recurso poco frecuente en general en Batman para mostrar sus sentimientos y motivaciones. Tanto él como Catwoman relatan al otro a modo de carta cuánto está aconteciendo y qué es el que pasa por sus mentes, pero fundamentalmente en sus corazones. Estos párrafos se superponen fundamentalmente en las escenas de peleas y curiosamente mejoran la apreciación total, sin enlentecer el flujo de los acontecimientos.

Batman se define como suicida, no como el todopoderoso redentor que se esfuerzan otros en mostrar. Y si bien durante todo el arco sobresale su faceta de estratega y líder de este variopinto escuadrón suicida, su costado vengativo y hostil juega una parte importante, ya que continuamente avisa a Bane que le quebrará la espalda. La Gata se muestra también como una persona herida de un pasado por la horfandad, una ausencia de cariño constante en su vida y algo en lo que ambos concuerdan: juntos alivian sus mutuos dolores.

La obra está está muy bien lograda, resaltando en asuntos como en lo que parece inverosímil como un anciano rechoncho como recurso principal para capturar a un megapoderoso villano que puede controlar las emociones... peron que tiene su fundamento en que, precisamente, el Ventrílocuo ya está controlado por Scarface, lo que lo vuelve idóneo para enfrentarse al Psicopirata.

La derrota de Bane es apabullante, con espalda quebrada incluída y que lo hace tomar la decisión de regresar al uso de veneno ahora en haras de una nueva venganza. 

Sobre el final, en las azoteas, Batman y Catwoman se permiten hacer el amor antes que llegue la mañana y en ese impass cada uno evoca cómo conoció al otro. Curiosamente, Batman recuerda el primer robo de la ladrona vestida de anciana, evento que sucede en su primera aparición en los comics, mientras que ella menciona la aparición de un Bruce Wayne disfrazado en el Callejón del Crimen, en Año uno. También, se los puede ver luchando contra algunos enemigos menores que han aparecido poco y nada en los últimos tiempos, como el Rey Reloj, el Monje Loco, el Rey Serpiente o El Rey de los Condimentos. Se agradecen esos cameos particulares.

El fortuito y esperado escape de Catwoman al final también sirve para que el Caballero Oscuro libre una investigación rápida sobre los cargos que se imputan sobre ella, descubriendo que evidentemente se ha autoinculpado para proteger a su amiga de la infancia, Holly Robinson.

Mikel Janín y Mitch Gerards son los ilustradores de esta gran segunda parte de una etapa que ya está encontrando forma y trae un soplo de frescura, por más que retome personajes ya clásicos, ya que son bien aprovechados.

Nota personal: 10