La muerte de la familia

 "Tu reino se pudre por debajo de ti. Me pone de mal humor, de muy mal humor. ¡He vuelto para salvarte!"

Joker

Luego de un año de ausencia, el Principe Payaso del Crimen ha retornado a la primera plana con una serie de golpes innegablemente espectaculares.

Su primera intervención es en la comisaría central, donde provoca un apagón y en una secuencia cinematográfica asesina a varios oficiales a oscuras, hace chistes a Gordon y va por el botín por el que fraguó ese ataque: llevarse su rostro de la sala de evidencias, que fuera arrancado por el Muñequero.

Luego, usando ese inmenso y propio injerto de piel estirado sobre su facie, anuncia el asesinato del hijo de su primera víctima pública, siniestro en el que tiene éxito pese a los preparativos de Batman y el cuerpo policial. El Murciélago detecta en la nueva toxina utilizada una serie de componentes en esta que conforman la sigla A-C-E y lo interpreta como una referencia a Ace Quimicals, lugar donde el otrora Capucha Roja se convirtiera en el Joker. En la planta química, sobre una pasarela, de hecho encuentra a Harley Quinn vestida con ese clásico y pintoresco atuendo.

En tanto, el verdadero demente llega de improvisto a la mansión Wayne y rompe con lo esperado al secuestrar a Alfred, al parecer afirmando que es porque necesita un mayordomo para un evento que ha planificado.

Todo el arco está orquestado para que uno sienta que el enemigo ahora está a un paso del héroe, reutilizando continuamente el suspenso para mantener la atención y aumentar las expectativas gradualmente. Incluso, se lo ve reclutando al Pingüino y a Riddler para su esperado acto final.

En el dique que quisiera envenenar en sus primeros encuentros, Batman y el Joker se ven las caras, y el segundo le explica que ha averiguado la identidad de todos sus aliados y los va a matar. Por lo tanto, la trama vira de pronto hacia una terrorífica incógnita que podría llegar a un punto de no retorno: ¿es posible que el mayor enemigo del Murciélago conozca quiénes son su vida privada Batman, Nigthwing, Robin, Red Robin, Batgirl y Red Hood? El propio Encapotado no ayuda a disipar los temores cuando revela que en una ocasión encontró un naipe en un bote y que temió que el maniático hubiera estado en la cueva...

Y entonces se desinfla todo. El guión se cae por su propio peso y hace gala de la frase clásica de mucho ruido y pocas nueces. Un ataque estúpido, un rival vencido fácilmente, un banquete en el que parece que les arrancó los rostros a los aliados capturados... muucho discurso en el momento donde debe pesar la acción, que bordea lo insoportable y, como colofón, un bello estado original de regreso al de antes de empezar la lectura. Promesas eternas como de político en campaña de algo que supuestamente será grandioso y se queda en eso, en palabras. 

Al finalizar de leerlo, se siente que Scott Snyder lo escribió tomando sus rasgos favoritos del personaje (y de varios fanáticos), así como también le otorgó una tamaña crueldad y sadismo que parecen más tomadas del cine que de la propia biografía del villano y que, desgraciadamente, ha hecho escuela con este cómic. Sobre la historia en sí, creo que el autor en ningún momento pensó en el final, sino más bien en que la gente compre todos los capítulos y hay que reconocer que lo ha logrado. Por si fuera poco, se trata de un crossover con otras colecciones, hecho que aumenta la sensación de coitus interruptus al no estar a la altura de lo que generó previamente.

La muerte de la familia tiene un nombre prestado que le queda gigante, y que sólo puede titularse así por un claro golpe de efecto comercial y que no ha sido defenestrado por ello como le ocurrió a Año dos.

El arte es otro cantar: Greg Capullo hace un trabajo magnífico, aterrador, climático, brindando escenas emblemáticas, de las que se guardan en la retina y son sus lápices los que realmente levantan la nota y hacen memorable a un arco que está sobrevalorado. Algunos de nosotros todavía esperamos más que un Joker con la cara arrancada para valorar una historia.

James Tynion IV también coescribe algunas historias aledañas, dibujadas por Jock.

Nota personal: 7